El 6 de noviembre de 1992 el Gobierno de Canarias, a propuesta de la Presidencia, acuerda iniciar los trámites para la declaración de Lanzarote como Reserva de la Biosfera en el marco del Programa MAB (Man and Biosphere) de la UNESCO. La misma decisión había sido adoptada por el Pleno del Cabildo Insular de Lanzarote el 26 de abril de 1992. Finalmente, el Consejo Internacional del Programa MaB de la UNESCO acordó el 7 de octubre de 1993 declarar la isla de Lanzarote como Reserva de la Biosfera.
Con la finalidad de impulsar y desarrollar la declaración de Lanzarote como Reserva de la Biosfera y coordinar las actuaciones de las distintas Administraciones Públicas y las que se entablen entre éstas y las entidades privadas, en su caso, el Cabildo Insular, en ejercicio de su potestad de autoorganización, crea, como órgano desconcentrado y sin personalidad jurídica propia, el CONSEJO DE LA RESERVA DE BIOSFERA DE LANZAROTE.