Cabildo de Lanzarote

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SEMINARIO SOBRE LA RESERVA PARA INVERSIONES DE CANARIAS

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Lanzarote fue declarada en 1993 Reserva de Biosfera por el Programa MaB (Hombre y Biosfera) de la Unesco. La declaración, solicitada por el Cabildo de Lanzarote, resultó extraña y atípica en la Red Mundial, puesto que con anterioridad las Reservas de Biosfera declaradas coincidían, en su mayoría, con espacios naturales protegidos donde la población humana apenas intervenía.

Sin embargo, Lanzarote se comprometía ante UNESCO íntegramente, con su frágil territorio altamente habitado, de paisajes únicos, junto a una industria turística desarrollada que ya había sufrido sus primeros signos de saturación y crisis en 1992-3.

En 1995, la Conferencia Internacional de Expertos sobre Reservas de Biosfera celebrada en Sevilla para evaluar y reorganizar su funcionamiento tras la Conferencia de Rio’92, estableció unas directrices para las Reservas de Biosfera a las que Lanzarote, junto a Menorca, respondían anticipadamente.

La Estrategia de Sevilla, que Unesco aprobaba a raíz de dicha Conferencia, asumía que el reto para el siglo XXI consiste en aprender a hacer bien lo que hoy hacemos mal y no sólo en preservar bellos paisajes de la acción humana. Además renovaba los objetivos y establecía nuevos compromisos para todas las Reservas de Biosfera.

Hoy el programa MaB de Unesco cuenta en su haber con Reservas de Biosfera complejas y pobladas que se enfrentan a las contradiciones propias de nuestra civilización. En ellas, ser Reserva de Biosfera significa evidenciar el conflicto entre conservación y desarrollo, entre corto y largo plazo, entre bienes comunes e intereses privados.

Lanzarote inicia su andadura como Reserva de Biosfera en 1996, aprobando la creación (1996) del Consejo de la Reserva de Biosfera de Lanzarote, órgano de participación que debe velar por el cumplimiento de los compromisos adquiridos ante UNESCO.

Pero es en 1998, con la aprobación de la Estrategia Lanzarote en la Biosfera (Estrategia L+B), cuando Lanzarote empieza a dotar de contenido a su declaración, dando pie a un intenso debate social y político sobre los riesgos y oportunidades insulares vislumbrados en su futuro. Con el fin de intervenir en el crecimiento turístico, se aprueba en 2000 una revisión del PIOT llamada "Moratoria Turística", y con el fin de hacer visible ante la sociedad el estado y evolución de la Isla, se aprueba en el año 2000 el Observatorio de Lanzarote.

En 2000 la Unión Europea aceptó la propuesta LifeLanzarote 2001-2004 con la cual el Cabildo solicitaba apoyo para explorar nuevas herramientas que permitan superar los obstáculos legales, financieros y administrativos para poder evitar nuevos crecimientos de la oferta alojativa turística, lo que agravaría aún más la presión que soportan la naturaleza y sociedad insular:

“...hoy hay muchas más personas viviendo en Lanzarote, con servicios sociales sobresaturados, una convivencia social enrarecida, degradación de las relaciones laborales, y con las administraciones públicas sometidas a demandas por la población tan rápidas que resultan inabordables.” )

La Unión Europea apoya el interés del Cabildo en contar con tributos ambientales específicos (la ecotasa balear es un precedente insuficiente), con los que será posible abordar la protección de la biodiversidad, restauraciones ambientales, reducción de consumos y emisiones (agua, energía, residuos, transporte) pero, sobre todo, el rescate de derechos edificatorios consolidados.

Además, la sociedad insular dispondrá con el nuevo Life, "Life Lanzarote 2001 - 2004" de nuevas orientaciones políticas y económicas, así como impulsos y recursos con los que se podrán retomar las propuestas de la Estrategia Lanzarote en la Biosfera.

 

biosfera@cabildodelanzarote.com